Cruzar la cordillera de los Andes llega a ser un pendiente en la vida de muchos argentinos. Te invitamos a realizar este viaje con nosotros y poder disfrutar de Mendoza, disfrutar del sol y de un buen vino, luego despedirnos de nuestra región de cuyo y adentrarnos en medio de las montañas hasta llegar al país hermano de Chile.
Nuestra primera parada en Mendoza nos espera con paisajes únicos, alojándonos en el centro de la capital mendocina tendremos todo al alcance de pocos pasos. Una de las tardes es consigna poder disfrutar de las termas de Cacheuta, enclavado en la montaña, este complejo para toda la familia ofrece sus piscinas cubiertas y descubiertas. De estas termas no es posible irse sin degustar un asado completo.
Comenzar el viaje hacia Chile involucra conocer paisajes de alta montaña, el contraste de colores se comienza a apreciar antes de llegar a los 3500 metros sobre el nivel del mar, pasando por el Puente del Inca y distintos espejos de agua. Chile nos recibe con el Paso de los Caracoles, imponente obra vial en altura. Ya en Viña del Mar, nos encontramos con el Océano Pacifico, de ahí las localidades de Valparaiso, Concon y Reñaca ofrecen línea de costa y una urbe preparada para el turista.
El ascenso a los cerros de Valparaiso es un imperdible, la vista panoramica ya se diurna o nocturna maravillan a cualquiera. Su puerto es punto de encuentro para realizar un paseo en lancha que nos deja adentrarnos al pacifico, de ahi, lobos marinos y la industria maritima se pueden apreciar por la extensa linea de costa. A unos 100km de distancia la capital de Santiago de Chile nos espera para conocer su arquitectura y centros comerciales, no sin antes visitar Isla Negra, donde la casa del escritor Pablo Neruda nos invita a vivir la historia.
Cruzar la cordillera de los Andes llega a ser un pendiente en la vida de muchos argentinos. Te invitamos a realizar este viaje con nosotros y poder disfrutar de Mendoza, disfrutar del sol y de un buen vino, luego despedirnos de nuestra región de cuyo y adentrarnos en medio de las montañas hasta llegar al país hermano de Chile.
Nuestra primera parada en Mendoza nos espera con paisajes únicos, alojándonos en el centro de la capital mendocina tendremos todo al alcance de pocos pasos. Una de las tardes es consigna poder disfrutar de las termas de Cacheuta, enclavado en la montaña, este complejo para toda la familia ofrece sus piscinas cubiertas y descubiertas. De estas termas no es posible irse sin degustar un asado completo.
Comenzar el viaje hacia Chile involucra conocer paisajes de alta montaña, el contraste de colores se comienza a apreciar antes de llegar a los 3500 metros sobre el nivel del mar, pasando por el Puente del Inca y distintos espejos de agua. Chile nos recibe con el Paso de los Caracoles, imponente obra vial en altura. Ya en Viña del Mar, nos encontramos con el Océano Pacifico, de ahí las localidades de Valparaiso, Concon y Reñaca ofrecen línea de costa y una urbe preparada para el turista.
El ascenso a los cerros de Valparaiso es un imperdible, la vista panoramica ya se diurna o nocturna maravillan a cualquiera. Su puerto es punto de encuentro para realizar un paseo en lancha que nos deja adentrarnos al pacifico, de ahi, lobos marinos y la industria maritima se pueden apreciar por la extensa linea de costa. A unos 100km de distancia la capital de Santiago de Chile nos espera para conocer su arquitectura y centros comerciales, no sin antes visitar Isla Negra, donde la casa del escritor Pablo Neruda nos invita a vivir la historia.